Dice sentenciando Albert Espinosa, que la personalidad va cambiando la moral propia de la gente y que esos juicios morales y esas normas a los que continuamente -desde que nacemos- estamos sometidos y que nosotros mismos nos creamos, nos impiden ser y darnos a conocer como realmente somos. Vivimos extremadamente condicionados por el que dirán, por los prejuicios. Somos prisioneros de nosotros mismos y esclavos de de nuestro conformismo.
Hemos de acordarnos –como dice Ismael Serrano en “Rebelión en Hamellín”- de vivir… No nos tiene que engañar el flautista…Hemos de ser libres, arriesgarnos más, ser nosotros mismos y tener más coraje para hacer frente a esos momentos que nos hacen vivir sometidos a esas normas impuestas que en numerosísimas ocasiones otros, muy “listos” deciden por nosotros y nos imponen, como si fuéramos torpes o tontos morales, llegándonos a convertir en marionetas sumisas y tremendamente súbditas a sus órdenes.
“No sé quien me había explicado que existe un instrumento para cada persona –dice Albert en su Mundo Azul- que se adapta a sus características. Solo debes saber si perteneces al viento, a las cuerdas o a la percusión”. Yo soy viento, no me dejo imponer esas normas. Siento, pienso y establezco mis propias reglas. Las busco a través de nuevas posibilidades, en nuevas aventuras. Las cuerdas las encuentran en esa vida cómoda, segura y sin riesgo alguno que les ofrece la cotidianeidad, en ese lago tranquilo que rara vez arriesga por lo desconocido. A mí me gusta subir montañas, hacer cumbres.
Tú decides que instrumento tocar. Personalmente tengo muchas teorías de cómo identificar a qué grupo pertenece cada una de las personas que me cruzo en mi camino. No es difícil averiguarlo… La percusión, por ejemplo, la elijen aquellos en los que su inteligencia va más ligada a la mente que al corazón, al pensamiento que a las emociones…Les verás siempre prisioneros de la mente, de ellos mismos, sin poder traspasar esas absurdas barreras educacionales y culturales aprendidas e impuestas. No son libres para decidir SI o No y viven su vida desde el sofá de su casa, pensando en el pasado y en el futuro. No viven, piensan en vivir únicamente.
Sin duda el instrumento que eliges para acompañar y armonizar tu vida es muy importante…Si aún no sabes lo que quieres tocar…Elige el instrumento adecuado para ti… Toca y deja tocar.