Apenas falta poco más de una semana para que comience la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU) de 2024. Muchos de nosotros la seguimos llamando Selectividad y aunque la esencia y lo crucial de la prueba sigue siendo la misma para que los estudiantes de segundo de Bachillerato puedan acceder a diferentes carreras universitarias según sus calificaciones, el procedimiento ha cambiado y tenemos hasta 17 pruebas de acceso a la Universidad muy distintas entre sí para cada territorio español. Y aunque la tendencia parece ser que camina a homogenizarlas, aún hay diferencias entre las selectividades de cada autonomía.
Los alumnos guadalajareños al estar vinculados a la Universidad de Alcalá de Henares serán los primeros aspirantes de España en realizar la EBAU, presentándose a la prueba a partir del día 3, 4, 5 y 6 de junio. Lo mismo sucede con la convocatoria extraordinaria, que tiene lugar un mes después, los días 2, 3 y 4 de julio.
Las razones por las que se ha llegado a tener diecisiete pruebas de acceso diferentes se debe a que las consejerías de Educación autonómicas no han respetado los contenidos mínimos establecidos, ni los porcentajes en los que cada uno debe influir en la nota final. En algunas comunidades se eliminan algunos temas, se disminuye el nivel de exigencia de algunos aspectos, se concreta qué tipos de preguntas aparecerán y que grado de opcionalidad se le permitirá al alumnado, mientras que en otras comunidades se siguen otros criterios completamente diferentes.
El agravio comparativo por las diferencias encontradas es enorme y posiblemente alumnos de una determinada comunidad autónoma en la que se haga una EBAU relativamente exigente, no pueda entrar en una Universidad a hacer el grado que desea, porque la plaza que él hubiera ocupado, ha sido ocupada por otro alumno que, aunque su nivel es menor, tiene una nota de EBAU más alta, ya que la ha hecho en una comunidad que es más permisiva. Esto solo se evitaría si todas las comunidades autónomas hiciesen la misma EBAU, solo así habría una auténtica igualdad de oportunidades para todos los estudiantes.
Otras desigualdades detectadas a parte de las diferencias en los contenidos a aprender en cada comunidad radica en las diferencias en la influencia de cada uno de los bloques de contenidos en la nota final, las diferencias en el tipo de preguntas del examen, las diferencias en el grado de opcionalidad, es decir en la proporción de preguntas que se pueden dejar de contestar del total de preguntas, y en los criterios de corrección a seguir por parte de los correctores. Y aunque les parezca mentira también hay grandes diferencias en los criterios de corrección. Solo la mitad de las comunidades dan criterios de corrección específicos. En relación a la ortografía sólo seis CCAA concretan la penalización por errores ortográficos. En algunas comunidades se dan indicaciones generales y en otras indicaciones más concretas y precisas al respecto ortográfico. Sólo la mitad de las comunidades dan criterios de corrección específicos; seis comunidades concretan la penalización por errores ortográficos; en unas no penaliza nada, en otras con más de más de 5 faltas ya se suspende el examen, mientras que en en otras tan solo se descuenta 3 puntos del examen y en otras se deja a la decisión del corrector.
La mejor solución para evitar este grave problema de desigualdades que hay entre las diferentes pruebas EBAU autonómicas, sería realizar la misma prueba en todas las comunidades autónomas y durante los mismos días. Así se aseguraría que alumnos de Guadalajara tendrían las mismas oportunidades que por ejemplo alumnos de Castilla la Mancha o que alumnos de Murcia por poner un ejemplo; y aseguraría que todo el alumnado que accede a la universidad lo hace en igualdad de oportunidades.